Tres días después de cometido el robo, efectivos policiales pudieron esclarecer el hecho y determinaron que una persona del entorno habría sido el autor.
En la jornada del domingo, delincuentes ingresaron a una vivienda del departamento de Jáchal y se llevaron una gran suma: $200.000 y 10.000 dólares.
El dinero pertenecía a los ahorros que una docente jubilada que había juntado la plata durante años y la tenía en su casa sin medidas de seguridad. Cuando la familia Funes salió, los delincuentes aprovecharon el momento y cometieron el hecho ilícito.
Tres días después, tras varias investigaciones de efectivos policiales, se logró esclarecer el hecho y se confirmó lo que se pensaba desde un primer momento. Quien habría cometido el robo sería el sobrino de la mujer.
Desde un principio se creyó que era alguien del entorno familiar ya que eran muy pocos, y de ese entorno, los que sabían con exactitud la cantidad de dinero que la mujer tenía guardado.
El delincuente, al ingresar a la vivienda, habría ido directamente al lugar donde estaba el dinero. Luego, sin llevarse más nada, abandonó el domicilio.